13 principios de netiqueta para guiar a tus hijos
02 OCT 2023
Navegar por el entorno digital con amabilidad y respeto es una habilidad esencial para la generación joven actual. Conocer los principios básicos de la netiqueta (el arte de comportarse correctamente en Internet) ayuda a los niños a tener éxito tanto online como offline. Explora con tus hijos estos consejos útiles para que tengan una experiencia segura, reflexiva y responsable en Internet.
¿Qué es lo que te viene a la mente cuando oyes la palabra "netiqueta"? Según la enciclopedia Britannica, "el propósito de la netiqueta es ayudar a construir y mantener un entorno agradable, cómodo y eficiente para la comunicación online, así como evitar sobrecargar el sistema y generar conflictos entre los usuarios". En resumen, las normas tácitas de conducta online consisten en fomentar interacciones positivas que reflejen los mismos valores que defendemos en la vida offline. Al igual que en el mundo real, cuando estamos en Internet formamos parte de una sociedad: somos ciudadanos digitales, y es nuestra responsabilidad comportarnos de manera respetuosa y segura. ¿Qué deben saber tus hijos para dominar el arte de la netiqueta?
1. Sé amable: Anima a tus hijos a tratar a los demás en Internet como lo harían en persona. Las palabras pueden dejar un impacto duradero, y un poco de amabilidad hace una gran diferencia. Antes de presionar el botón "enviar", los niños deberían preguntarse: "¿Le diría esto a alguien cara a cara?". Recuérdales que las interacciones online tienen consecuencias en el mundo real: la incitación al odio o los comentarios hirientes pueden dañar la reputación de una persona e incluso afectar futuras relaciones o posibilidades de empleo. En cambio, las palabras de apoyo y empatía pueden tener un efecto extraordinario en alguien que lo está pasando mal, aunque solo se digan en Internet.
2. Piensa antes de compartir: Lo que publicamos en Internet puede dejar una huella digital duradera, e incluso cuando compartimos algo con unos pocos amigos, siempre es posible que llegue a otras personas. Por eso, es esencial que hablemos con nuestros hijos sobre cómo compartir responsablemente. Enséñales a diferenciar entre lo que es apropiado compartir y lo que conviene mantener privado, tanto para fotos y videos como para texto. Puedes contarles algo que te haya ocurrido, por ejemplo, una ocasión en la que publicaste algo y luego te arrepentiste de haberlo hecho. De este modo, el tema será menos teórico, podrás mantener conversaciones valiosas con tus hijos y les demostrarás que estás de su lado.
3. Siempre verifica: Promueve el pensamiento crítico como un hábito. Aconseja a tus hijos que comprueben la información antes de compartirla o volver a publicarla. Compartir historias falsas puede dañar su reputación presente así como futura; incluso podría limitar sus opciones laborales. La desinformación se propaga como un incendio, y ser un ciudadano digital responsable significa verificar los hechos y promover la exactitud.
4. Cuestiona las identidades digitales: Ayuda a tus hijos a entender que no todas las personas que aparecen en Internet son quienes dicen ser. Un hombre de 40 años puede hacerse pasar fácilmente por una niña de 11. Fomenta el escepticismo y enseña a los niños a valorar su privacidad para que únicamente hablen con personas en las que confían de verdad.
5. Dales espacio a los demás: Enséñales a tus hijos a no sobrecargar a la gente con mensajes y comentarios, y a darles a sus amigos el espacio que necesitan para decir lo que piensan. La comunicación online es un camino de ida y vuelta que solo funciona cuando el respeto y la consideración son mutuos.
6. Pide permiso antes de compartir: Inculca el valor de pedir permiso antes de compartir fotos o información sobre otras personas. Respetar la privacidad de los demás demuestra empatía y consideración por sus sentimientos. Antes de publicar fotos o hablar de la vida de otra persona en Internet, tus hijos deben asegurarse de que tienen el consentimiento para hacerlo.
7. Respeta la privacidad de los demás: Imagina que un niño se conecta a la computadora de la escuela y descubre que un amigo que la había utilizado antes olvidó la sesión de sus redes sociales abierta. ¿Qué debería hacer? En lugar de aprovechar esta situación para burlarse del compañero, debería simplemente cerrar la sesión y recomendarle que tenga más cuidado en el futuro. Del mismo modo que tus hijos no deben utilizar las redes sociales de sus amigos sin pedir permiso, tampoco deben tomar los dispositivos de los demás ni acceder a las aplicaciones de otros sin haber preguntado antes.
8. No te olvides de tu entorno: Sumergirse en las posibilidades del mundo online puede hacer que a veces nos olvidemos de la realidad offline. Recuérdales a tus hijos que deben tener en cuenta su entorno antes de poner música, ver un programa o hacer una videollamada o una llamada telefónica en público.
9. Comunícate a conciencia: Si tus hijos dominan la habilidad de la comunicación online, sus mensajes serán respetuosos y bien recibidos. Explora con ellos las bases de una buena comunicación en Internet: desde ser conciso hasta elegir el tono adecuado para las distintas plataformas.
¿Sabías que:
- es de buena educación empezar cada conversación dirigiéndote directamente a la persona con la que estás hablando;
- los errores gramaticales pueden hacerte parecer menos respetable a los ojos de los demás, por lo que siempre debes revisar tus mensajes antes de enviarlos;
- cuando envías un mensaje con signos diacríticos, es posible que el receptor no pueda leerlo;
- las MAYÚSCULAS EXCESIVAS pueden parecer que estás gritando;
- debes firmar tu primer correo electrónico con tu nombre completo para que el destinatario pueda identificarte fácilmente?
10. Sé consciente de tu poder: Conversa con tus hijos sobre la responsabilidad que conlleva influenciar en Internet, incluso en círculos reducidos. Enséñales a tener en cuenta el impacto de sus palabras y acciones en su comunidad y anímalos a utilizar esta influencia de manera positiva para inspirar a otros a través de contenidos reflexivos y motivadores.
11. Elige un apodo neutro: Ayuda a tus hijos a elegir un nombre de usuario que no revele su identidad ni los avergüence más adelante. Un apodo original puede proteger su presencia en Internet a la vez que les permite expresarse de forma creativa.
12. Aprecia los momentos offline: Aunque el mundo online puede ser cautivador, recuérdales a tus hijos que se desconecten y presten atención también a las conversaciones cara a cara. No es de buena educación mirar el teléfono cuando alguien está intentando hablar contigo. Enséñales a valorar el momento presente y a estar atentos a quienes los rodean a través de diversas actividades o simplemente siendo un buen ejemplo para ellos.
13. Sé considerado al comentar: ¿Cómo hay que comentar según las reglas de la netiqueta? Aquí son muchos los aspectos para tener en cuenta. Lee más sobre ellos en nuestro artículo.
Al emprender este viaje de enseñarles a tus hijos los principios de la netiqueta, recuerda que la amabilidad, el respeto y la responsabilidad trascienden el mundo virtual. Si fomentas estos valores en sus interacciones online, no solo estarás dando forma a su presencia digital, sino que los estarás ayudando a convertirse en personas compasivas y conscientes, capaces de prosperar en cualquier entorno.